Historias de Suso

Seguimos en mi infancia, tendría unos cinco o seis años, mi madre y mis hermanas me compraban coches pequeños de juguetes, claro al estar en el suelo pues lo lanzaba para que cogiera velocidad pero un día fijándome en los garajes de algún vecino donde veía que se levantaban las puertas para meter los coches, pues un día fijándome en el vídeo VHS vi que se levantaba la tapa, pues si utilice el vídeo como garaje para los coches y adiós al vídeo, pero un día descubrí algo circular que daba vuelta sólo si los ponías en marcha jeje…. Yo me subí al sillón y probé de poner el coche en centro y ponerlo en marcha, el coche comenzaba a dar vueltas y vueltas hasta que iba muy rápido donde salían despedidos contra los laterales o para el medio del salón, pero cuando se estampaba con los laterales sonaba fuerte que hacía ¡Booommm! Y podía escuchar a mi madre “¡¡Jesuuuuss! ¿Que estás haciendo? Estate quieto!!” Yo le respondía: “na maaaa, estoy jugando con los coches”, yo seguí jugando muchas tardes

eguiamos en casa y estábamos casi toda la familia viviendo en casa, bueno mi hermana la mayor se habría ido de casa porque se caso y en aquella época ya tenia a sus dos hijos, por lo cual aun éramos muchos y mi madre como cada mes hacia una gran compra para tirar todo el mes. Un sábado por la tarde salió mi madre con una de mis hermanas a hacer la comprar mientras dejaban a las otras hermanas en casa cuidándome y demás, todo fue bien, tranquilo hasta que llego mi madre con la compra donde mando a todos a bajarla para que ayudaran, menos yo que estaba rodando por el suelo haciendo no se el que la verdad, pero a mis hermanas y mi madre no pensaron que dejar las bolsas en el suelo iba a ser un peligro conmigo, claro en unas de esas dejaron una botella de jabón Coral de cinco litro fuera de la bolsa, me dejaron solo para ir a buscar mas, decir que ellas tenían que subir y bajar unos noventas escalones para ir a buscar la compra, yo estaba solo y la botella de Coral estaba a mi alcance, yo